Súmale actividad física a tu edad

Muchos son los beneficios que tiene el hacer actividad física o practicar deporte. La Organización Mundial de la Salud recomienda que a la semana una persona debe realizar entre 150 a 300 minutos de actividad moderada.
Y es que el ejercicio es fundamental y nos ayuda a mejorar nuestra salud física, ósea, cardiopulmonar y mental. Para nuestro médico ortopedista traumatólogo, Julio César Palacio el ejercicio mejora el estado físico y beneficia el funcionamiento cardíaco, vascular y muscular, por lo que se hace necesario practicarlo en todas las etapas de la vida.
"En la medida que aumenta la edad se va perdiendo agilidad, reflejos y el sistema musculoesquelético va cambiando, por lo que se hace necesario que la actividad física sea constante y parte de la rutina diaria", comenta nuestro especialista en ortopedia y traumatología.
Sin embargo, también es necesario tener en cuenta las enfermedades de base que pueda tener el adulto mayor para evitar complicaciones o lesiones que se pueden evitar, "es necesario que el adulto mayor y el cuidador conozca los propios límites, así mismo que el ejercicio que se realice sea de manera gradual, que el adulto mayor permanezca bien hidratado durante y después del ejercicio", explica el doctor Palacio.
¿Por qué es importante el ejercicio en el adulto mayor?
- Control en las enfermedades cardiovasculares. Ayuda a mejorar el proceso de riesgo sanguíneo y oxigenación a los tejidos.
- Reduce la pérdida ósea propia de la edad, potencia la musculatura.
- Reduce el riesgo de caídas, ya que mejora la atrofia muscular, el equilibrio, la coordinación y la elasticidad.
- Reduce el dolor musculoesquelético asociado a enfermedades como la artrosis o la artritis.
- Refuerza el sistema inmune.
- Ayuda a mejorar y conservar la función cognitiva.
- Disminuye la prevalencia de ansiedad y depresión. Con la actividad física se libera endorfinas, hormonas relacionadas con la sensación de placer y felicidad.
¿Cómo podemos iniciar la actividad física?
- Comenzar con actividades de forma progresiva para ir acondicionando el cuerpo a cargas y resistencias.
- Realizar estiramiento antes y después de la actividad física. Con ello se evitan tirones y desgarros.
- Elegir ejercicios que se ajusten a tus necesidades.
- Ten una buena y balanceada nutrición. Evita realizar ejercicio en ayunas.
- Si tienes alguna patología de base, debes consultar al médico tratante antes de iniciar con la actividad física.
En nuestra Clínica contamos con un grupo de especialistas en ortopedia y traumatología, cada uno con un enfoque diferente del cuerpo humano, así como de la etapa en la que se encuentre el paciente.
Igualmente, contamos con los programas de Adulto Mayor Fracturado y Reemplazo Articular de Rodilla, acreditados por la Joint Commission International, el ente con mayor experiencia y prestigio en acreditación médica en el mundo, lo que le garantiza al paciente, su familia y a la población en general, que somos un centro hospitalario altamente especializado en estas patologías, lo que nos permite obtener los mejores desenlaces clínicos.
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